Este perro toma el nombre de la isla de Ibiza. Su origen más lejano debe buscarse entre los progenitores de los lebreles mediterráneos que a su vez descienden del más antiguo Perro de los Faraones, que habría sido llevado a las islas hace aproximadamente 3000 años. No sólo en España se encuentra en gran número sino también en Francia, sobre todo en Provenza, utilizándose con muy buenos resultados en la caza de los pequeños conejos salvajes. Las jaurías, a veces numerosas, están formadas sólo por hembras y un único macho, para evitar peleas que incluso podrían resultar fatales. Hacia 1930 fue llevado a Inglaterra donde, desde entonces, siempre ha tenido un gran éxito en las exposiciones caninas.